La Adopción es voluntaria - Adopción Gay 4/4
Hay otro aspecto de la adopción
por parte de las parejas homosexuales que quisiera tratar en esta serie de
videos. Es el hecho de que negarle este
derecho a estas parejas, el estado comete una injusticia contra ellas, contra
los niños y a final de cuentas contra la sociedad.
Como ya sabemos, una pareja
heterosexual tiene la capacidad de reproducirse a través de una relación
sexual. En los países que yo conozco,
esto les da el derecho a tener hijos. Automáticamente. Una de estas parejas puede tener hijos y
conservarlos aunque no haya deseado tenerlos en primer lugar. Es más, esta pareja no tiene que demostrar
que es apta para educar a sus hijos y mantenerlos de manera previa. A lo mucho,
se meterán en problemas y podría el gobierno quitarle la custodia de sus hijos
si demuestran ser terribles en su trabajo como padres. Sin demostrar su deseo
por tener hijos ni su capacidad para criarlos, una pareja heterosexual puede
tener los que quiera y en muchos lugares no se meterá en problemas si no es el
mejor en esto, incluso si es mal padre, siempre y cuando no haga algo terrible
y llamativo. Pero no crean que estoy en contra del derecho que estas parejas
tienen. Es mi creencia que si tienen
esta capacidad reproductiva, es su derecho conservar a los hijos que sean
producto del ejercicio de esta capacidad. Pero, ¿qué pasa con una pareja que no
es fértil?
Estas parejas tienen que
demostrar, uno, que desean tener hijos y dos, que son capaces de criarlos de
manera adecuada. Deben demostrar que
desean tener hijos porque esto no sucederá simplemente en su caso, ni siquiera
como accidente como ocurre con muchas parejas heterosexuales fértiles. Tienen que expresar este deseo, y demostrarlo
pasando por todo el proceso legal que implica la adopción de un niño y la
aceptación de la responsabilidad adquirida al hacer esto. Además, tienen que probar que son capaces de
criarlo adecuadamente, mostrando evidencia de varios factores, entre ellos:
situación económica estable, relación estable, salud mental, salud física. A veces es un proceso agotador que de verdad
pone a prueba a la pareja en el primer aspecto, en su deseo por adoptar. Pero
si pasa estas pruebas, podrá lograr su objetivo y formar una familia. Ahora, no
intento discutir aquí si el filtro es el adecuado en cuanto a evaluar los
aspectos anteriormente mencionados, pero valga decir que sí creo que debe haber
un filtro, lo más eficiente posible, que le garantice a estos niños el tener un
buen hogar y una buena familia. En algunos lugares este filtro es mejor que en
otros. Pero en muchos países, el hecho de ser una pareja gay descalifica
automáticamente a quienes desean ser padres.
Pero, ¿por qué? Una pareja gay
puede cumplir todos los demás criterios necesarios para considerar a una pareja
de adultos “apta” para adoptar a un niño. ¿Pueden generar un ingreso
suficiente? ¿Pueden proveer de techo, alimentación y educación? ¿Pueden amar a
sus hijos? ¿Pueden inculcarles valores? Sí, sí pueden. A veces, pueden hacerlo
mejor que algunas parejas heterosexuales para las cuales el embarazo fue una
mala noticia. Y recordemos que, a esas parejas, ni se les pregunta si se creen
capaces de ser padres, simplemente obtienen ese derecho de manera automática. Aún
así, a las parejas homosexuales les es negado este derecho porque se establece,
explícita o implícitamente, que para poder adoptar, la pareja tiene que ser
heterosexual. La principal manera de
levantar esta barrera es impedir que se legalice el matrimonio entre personas
del mismo sexo, porque el matrimonio pone a una pareja en una mejor posición a
la hora de querer adoptar, y si podemos prevenir que los homosexuales se casen,
simplemente les diremos “lo sentimos, ustedes no pueden adoptar, no están
casados”, y listo. Pero en todo este asunto, el único criterio que se ha utilizado
para descalificar a esta pareja es el hecho de que se trata de una conformada
por personas del mismo sexo. Eso es
todo.
Es necesario eliminar la
heterosexualidad de la lista de requisitos para adoptar, pues ésta no indica
nada sobre los factores que realmente importan a la hora de determinar si una
pareja o persona es apta para adoptar a un niño. Además, recordemos que este derecho nunca es
ejercido por todas las parejas que expresen su deseo de adoptar, sino por
aquellas que también demuestren su capacidad para hacerlo al existir un filtro
necesario en este proceso. Y por si fuera poco, recordemos las altas exigencias
que estas parejas tienen que cumplir a veces para lograr adoptar, mientras que
muchas parejas heterosexuales fértiles claramente no están cumpliendo bien con
su trabajo como padres. Si se trata de pensar en los niños, démosle la
oportunidad de ser criados por una pareja que exprese su deseo y su capacidad
para hacerlos, sean o no heterosexuales.